Las autoridades salvadoreñas asestaron un nuevo golpe a la criminalidad salvadoreña, permitiendo esta noche el concierto del trapero Bad Bunny (conejo enojado). Así lo asegura el Director General de la Policía Nacional Civil.

«Creemos que este gobierno tomó una buena decisión al permitir que este muchacho dé su concierto en el país, pues los índices de robos y asesinatos se han reducido desde la tarde, y creemos que seguirán así hasta que el concierto termine», informó Cotto.

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